La lava del volcán de la Palma no distingue qué se traga. Avanza su camino de destrucción sin contemplar que deja bajo suyo o a qué negocios puede perjudicar. Y ahora le ha tocado al prostíbulo más conocido de la isla, Las Martelas. Lleva este nombre por donde está ubicado, un camino que lleva a esta partida. Entre los autóctonos y turistas era el nombre que recibe esta casa de citas que ahora, por la actividad volcánica, se ha tenido que clausurar.
Realmente no tiene ningún nombre. Para no tener, no tiene ni licencia. Es un local convertido en el puticlub más conocido de esta pequeña isla que vive de los plátanos y del turismo, pero que no tiene ni luces de colores fuera ni ningún cartel que pueda hacer intuir qué tipo de negocio se ofrece. Pero no hace falta, todo el mundo lo sabe.
La lava acaba con el prostíbulo más conocido de la isla
Ahora, sin embargo, por la proximidad del avance la lava se ha tenido que desalojar las casas próximas al prostíbulo y, claro, también este local del camino de Las Martelas.
La principal actividad de Las Martelas se ha trasladado a uno de los otros puntos de la isla, a Barlovento. Según detallan varios medios locales, que se han hecho eco de esta triste noticia por muchos hombres de la isla, el local también servía como bar y muchos de los campesinos de la zona, después de una dura jornada laboral en los campos de plátanos, pasaban por este bar antes de volver a casa. Ahora tendrán que buscar otra distracción o esperar que todo vuelva a la normalidad y que el volcán permita recuperar la actividad.
Más allá del puticlub de La Palma
Mientras tanto, la actividad del volcán sigue. La nueva ruptura del cono principal del volcán de La Palma que tuvo lugar este miércoles mantiene el flujo de lava hacia el oeste de la isla, donde además crece la preocupación ante las emisiones de dióxido de azufre del penacho volcánico, que oscilan entre 6.000 y 9.000 toneladas diarias.
Imagen del volcán de La Palma, que incluso ha obligado a cerrar un puticlub / Miguel Calero
A las últimas horas han aumentado a La Palma los seísmos de magnitud superior a 3,5 en profundidades medias y profundas -más de 20 kilómetros-, cosa que hace que se incrementen las posibilidades que se produzca un seísmo de intensidad VI (levemente nocivo), según señala el Departamento de Seguridad Nacional (DSN) a su informe emitido a las ocho de la mañana, hora peninsular.
Constata además que la nueva ruptura del cono principal del volcán de Cumbre Vieja hace que se mantenga el flujo de lava hacia el oeste, alimentando las coladas ya existentes. Por otra parte, y ante la posible nueva llegada de lava al mar, Capitanía Marítima ha establecido un perímetro de exclusión desde el sur (Puerto Naos) hasta el norte (Tazacorte) y la paralela en la costa a media milla náutica del litoral.