Una playa de la costa del Mar Menor ha amanecido con un inesperado forastero. Un pez luna rojo de 35 kilos y 1,45 metros de longitud fue hallado muerto en la orilla de las playas de Calblanque, Murcia, según informaron los responsables del Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila en sus redes sociales.  

Hallan muerto un enorme pez luna rojo en una playa

Pese a que este ejemplar, llamado ‘lampiris guttatus’ habita en todos los océanos del mundo, su llegada no estaba ni mucho menos prevista. Si bien es común en lugares como Hawái y África occidental, sigue siendo poco común en el mar Mediterráneo.  De momento, su presencia es más usual en las aguas tropicales y en las profundidades. Algunos investigadores creen que esto es resultado del cambio climático y la subida de la temperatura del agua.

Además, se trata de una especie única. En el año 2015 se demostró que el pez luna mantenía su cuerpo por encima de la temperatura ambiente, erigiéndose como el único pez considerado de sangre caliente. Puede mantener de forma constante el núcleo de su organismo aproximadamente 5 grados más caliente que su entorno.

Por desgracia, el animal acabó rebozado en las arenas finas y doradas del frente costero del Parque Regional de Calblanque. Y para los que ya empiezan a salivar, la respuesta es ‘No’: pese a que es común en los restaurantes de Hawai, por lo general el L. guttatus no es objetivo de pesca ni de consumo.

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Hallan un pez luna rojo de 35 quilos en una playa de Múrcia / Parqrue Regional de Calblanque

El pez luna rojo es el único de sangre caliente

Su última puesta en escena fue deslumbrar a todos con su singular presencia. Descrito por primera vez por el zoólogo danés Morten Thrane Brünnich en 1788, su nombre 'lampiris' proviene del griego y significa "brillante" o "claro", mientras que la designación en Latín 'guttatus' significa “con manchas”. Su cuerpo es de color azul marino, que va a rosado en el vientre, con manchas blancas en hileras irregulares que cubren los flancos. Sus aletas deslumbran un rojo brillante, al igual que sus mandíbulas. Por último, destacan también su grandes ojos rodeados de amarillo dorado.

Esta vez, desafortunadamente, su exhibición estética fue más bien breve, pues el pez fue hallado mientras su luz ya apaciguaba.